miércoles, 24 de junio de 2009

¿Qué los hombres tardan menos?! ¡Venga ya...xD!

Empezaré diciendo lo que muchas mujeres están pensando...
NO, este artículo no va dirigido a nada sexual, porque en tal caso el título narraría: "¿Qué los hombres tardan menos?Estoy de acuerdo". Es obvio que cuando ellos quieren terminar, terminan, y seguidamente, se duermen. Y nosotras, desgraciada o afortunadamente*(porque disfrutamos más cíclicamente del placer) acabamos después...
Pero como iba diciendo, y antes de despistarme, quería hablar de una falsa creencia urbana: Que las mujeres tardan más en arreglarse que los hombres.
Con el paso del tiempo se ha podido observar que a medida que los hombres jóvenes adoptan medidas para cuidar su cuerpo, invierten más tiempo en él. Pero algunos hombres cazurritos ellos, si tuvieran que hacer la mitad de lo que hacemos nosotras, acabarían a las cuatro horas con las medias colgadas de la oreja y con miedo irracional a quitarse la banda de cera de la pierna. Si vale, es un poco absurdo el imaginarse un hombre en esa situación... Pero con esto vengo a decir que las mujeres podemos ser mucho mas eficientes, tanto en el sexo, como a la hora de arreglarnos:
A partir del momento que tenemos claro nuestro objetivo(que ponernos) empieza el maratón de belleza; primero la ducha, los geles, el champú con olor a frambuesa, la mascarilla hidratante, la crema, desodorante, la manicura, la pedicura, las cejas, la depilación, los rulos, la plancha, el rizador, otra capa de las uñas, ropa interior seductora ^^, rizador de pestañas, eyeliner, rímel, sombra, maquillaje, colorete, pintalabios, pendientes, pulseras, anillos, ropa, zapatos y por último el toque de nuestro perfume favorito para estar perfectas.
Ays...y todo por ellos...que no tardan dos minutos en vestirse, nos desvisten en uno y acaban en medio...desde luego no pierden el tiempo¬¬

martes, 23 de junio de 2009

Hay años para todo...

Bueno...al haber (por fin) terminado ya el curso puedo hacer una reflexión sobre él...
Por mucho que esta vez quiera equilibrar la balanza sé que desgraciadamente no ha sido uno de mis años más brillantes de estudiante. He estado bastante más por debajo de mi rendimiento posible, pero se han juntado muchas cosas, que no han hecho precisamente que diera todo en mis estudios. Primeramente, no era mi idea el ir al Brocense, fui obligada por causas ajenas a mi y no me quedó otra opción.
Mi clase no ha sido especial, ni original...era todo un poco muermo, cada uno iba a su bola, y ni siquiera hemos tenido quedadas interesantes ni hemos ido a lugares extraordinarios como Roma o Berlín a diferencia de los demás institutos cacereños...muy mala organización, cooperación y compañerismo. La gente estaba demasiado abstraída en sí misma y muchas personas me han parecido tan vacías que hasta deprimía. Solo se salvan pocas personas de la clase que realmente hayan merecido la pena, y que me han ayudado bastante en este penoso curso.
Es inevitable pensar en cursos mejores, por mucho que digan que el pasado pasado está. Echaba mucho de menos a mis compañeros de antes, al buen rollo de la gente, a las quedas, las excursiones a Sevilla, Madrid o Barcelona...las fiestas, el compañerismo en clase...claro, normal, el último curso logramos estar más juntos que nunca después de toda una infancia juntos.
En fin, los cambios pueden ser buenos o malos.
Éste desde un punto de vista negativo ha sido desastroso. Desde un punto de vista positivo me he dado cuenta de que muchas cosas, muchas personas, no son lo que aparentan ser; y a modo de caídas y rozaduras ahora las personas que no me aportan nada pasan de largo, y sólo permanecen las que verdaderamente merecen la pena...son pocas, pero valen mucho más que todas las que pasan de largo juntas.
Hay años para reír, o llorar, o pensar o no pensar, pero todo ello influirá a la larga en ti, y aunque en libertad para hacer lo que quieras siempre estarás sujeto a la esclavitud de elegir.